A lo largo de mi camino como terapeuta y explorador de las energías sutiles, he tenido el privilegio de vivir infinitas experiencias con consultantes en terapias energéticas.
Mis conocimientos en Física Cuántica, Radiónica y Biocomunicación Cuántica, junto con una búsqueda constante de conocimiento más allá de lo convencional, me llevaron a descubrir los fascinantes conceptos de Nikola Tesla, un genio adelantado a su tiempo.
Su forma sencilla y humilde de hablar sobre energía libre y sus revolucionarios experimentos me impactaron profundamente, revelándome posibilidades que parecían utópicas para su época, pero que contenían una verdad universal.
Entre mis investigaciones, también me adentré en los descubrimientos del físico alemán Winfried Otto Schumann, quien identificó las resonancias del sistema Tierra-Ionosfera, hoy conocidas como «Resonancia Schumann». Estas ondas vibran a la misma frecuencia que las ondas cerebrales humanas, 7,8 Hertz, conectándonos a todos como parte de un vasto circuito eléctrico universal. Este conocimiento me llevó a comprender que estas resonancias no solo nos vinculan con la Tierra, sino también entre nosotros mismos, abriendo un «campo de comunicación» que muchos llaman telepatía.
Nikola Tesla conocía profundamente este fenómeno y lo utilizó como base para algunos de sus experimentos más enigmáticos.
Descubrió un tipo especial de ondas que, a diferencia de las ondas hertzianas, aumentan su potencia con la distancia y viajan a una velocidad 27 veces mayor que la de la luz. Esta revelación me ayudó a entender por qué, en modalidades como «La Reconexión» o la Biocomunicación Instrumental con Quantec®, las sanaciones a distancia suelen ser incluso más efectivas que las presenciales.
A lo largo de los años, desde 2002 hasta 2010, mi camino estuvo lleno de aprendizajes con maestros, cursos y talleres. Destaco especialmente «La Flor de la Vida», «Geometría Sagrada» y «El Merkaba», que me proporcionaron claves para comprender la esencia de lo que Tesla quería transmitirnos hace más de un siglo.
Inspirado también por los conocimientos de la Dra. Lynne McTaggart, en libros como “El Campo” y “El Vínculo”, pude consolidar mi visión de cómo funcionan las terapias que emplean nuestras manos, la Energía Universal y el Amor Incondicional como motores de sanación.
Fue desde este espacio de comprensión y experiencia que nació Tesla Healing 369®.
En mi búsqueda descubrí que en 1896, Nikola Tesla tuvo un encuentro trascendental con Swami Vivekananda, un renombrado yogui y maestro espiritual del hinduismo, quien enseñaba los Vedas. Vivekananda compartió con Tesla la sabiduría milenaria del Prana y el Akasha, conceptos que resonaron profundamente con los descubrimientos científicos de Tesla sobre la energía que fluye a través de un medio invisible.
A partir de ese encuentro la espiritualidad y la ciencia se reconocieron mutuamente como dos lenguajes de una misma verdad: somos energía pura.
Tesla Healing 369® utiliza las frecuencias de la Energía Cósmica descubierta por Tesla para armonizar los cuerpos físicos y sutiles del Ser. Este equilibrio no solo promueve la sanación, sino también un profundo crecimiento interior.
He aprendido que, para facilitar este proceso, es esencial que el terapeuta se conecte con la energía del Amor, irradiada desde el corazón, porque el Amor es la fuerza más poderosa del Universo, el motor de la Vida y la Luz que guía nuestra evolución.
En un corto período, Tesla Healing 369® se consolidó como una modalidad de sanación poderosa, con resultados sorprendentes. Pacientes han testimoniado desde la sanación de enfermedades físicas como tumores o psoriasis, hasta transformaciones emocionales y espirituales: liberación de miedos, sincronías en su vida y una expansión de su conciencia que, muchas veces, supera la importancia de la propia sanación física.
Decidí nombrar esta creación Tesla Healing 369® en honor al visionario que dedicó su vida a desentrañar los misterios de la Energía Cósmica, la misma que los físicos cuánticos más tarde denominarían «Energía Tachiónica». Para Oriente, esta energía siempre fue el Prana danzando en el Akasha.
Hoy, Tesla Healing 369® representa el puente entre ciencia y espiritualidad, una modalidad que une el conocimiento cuántico moderno con la sabiduría ancestral, mostrándonos que todos somos parte de un mismo tejido energético en el que el Amor es la esencia que lo une todo.
